La asociación Ecologistas en Acción presentó ante el Ministerio de Industria, Energía y Turismo un documento explícito de alegaciones que contienen 14 motivos al proyecto de la multinacional Cairn Energy en el Mediterráneo. Mediante este escrito piden que se dicte una Declaración de Impacto negativa, la cual “impide llevar a cabo la primera etapa de explotación de hidrocarburos marinos”.
Además de esto, adelantó que presentará en los próximos días unas mil alegaciones individuales y aspira a recoger unas 50 mil firmas aproximadamente en la plataforma chance.org.
Hasta ahora, han alcanzado 30 mil firmas de personas que han manifestado su voluntad en una carta dirigida al ministro José Manuel Soria, para oponerse a la realización de estos trabajos.
La institución ha apuntado que estas perforaciones marinas en búsqueda de hidrocarburos suponen “un reforzamiento del actual modelo energético dependiente de los combustibles fósiles, que exige profundos cambios ante la amenaza del cambio climático y fin del petróleo barato”.
Por su parte, el grupo de ecologista sostiene que estas actividades implican “un grave impacto sobre la fauna marina protegida (tortugas, cetáceos) y los recursos pesqueros, en especial sobre aquellas especies con amenaza de extinción, tales como el atún rojo, langosta, cefalópodos, crustáceos, entre otros”.
Medidas corretoras insuficientes
El colectivo considera que las medidas impuestas en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) no han sido suficientes. El rorcual común, el cetáceo más importante, “se comunica a 300 kilómetros en la misma frecuencia que provocan las estampidas sónicas, afectando las comunicaciones de las manadas o de la madre con su cría”.
Asimismo, han señalado que las 254 mil hectáreas previstas de prospección “excede de la zona de los permisos concedidos por el Ministerio en 2010 y coincide con las migraciones de cetáceos entre el Mar de Liguria y el sur de la Península Ibérica y norte de África”.
